¿Por qué no es bueno comerse el tomalley de la langosta?

La langosta es un crustáceo marino perteneciente a la familia del cangrejo, el camarón/gamba, el langostino, la cigala y el bogavante.
A diferencia del cangrejo y el bogavante, en lugar de tenazas suele tener unas antenas muy largas cubiertas de espinas.
Este crustáceo debe cocerse mientras aún esté vivo debido a que la carne es muy delicada y se puede descomponer fácilmente. Es bueno acotar que cuando aún está viva suele tener un color marrón, en cambio cuando se cuece cambia su color a rojo ladrillo.
Al abrirla para consumirla, se puede ver una masa verdosa que se conoce como el tomalley. Esto viene a ser el hígado del animal. Si bien en condiciones normales puede comerse (es bueno acotar que pocas personas gustan del mismo por su amargo sabor) es posible que  la langosta haya sido capturada en marea roja y el mismo tiende a absorber las toxinas. Por lo tanto, consumir el tomalley de la langosta puede resultar tóxico. Es por esa razón que es mejor abstenerse de consumirlo por las dudas. Además, el mismo puede desencadenar cuadros alérgicos en  algunas personas.