La página de los por qué

Emigrar de Venezuela a pesar de que se ha convertido en un fenómeno masivo dada la situación país no es un proceso tan sencillo como se cree. El proceso de emigración supone: Legalizar y apostillar documentos. Tener los documentos de identidad vigentes, especialmente el pasaporte. Sacar las visas que exigen los países de destino y cumplir con los requisitos. Sacar antecedentes penales y apostillarlos. Reunir la cantidad de dinero necesaria, mínimo US$ 2.000,00 sin incluir el costo del pasaje y demás gastos.  Esto complica las aspiraciones de muchas personas. Ahora, como algunos no pueden cumplir estos pasos entonces se aventuran a emigrar del país con tan sólo la ropa que poseen y sin siquiera un centavo en el bolsillo. Esto se conoce como "irse de mochilero". Esta acción no suele ser buena idea porque conlleva muchos contratiempos: Al no poseer documentos estaría uno como inmigrante ilegal y ello conllevaría incluso una deportación. En efecto, por lo mismo

La crisis que se vive en Venezuela ha obligado a muchas personas a emigrar del país en búsqueda de una calidad de vida que su propia tierra le ha negado por culpa de un sistema de gobierno incompetente que busca copiar el patrón del gobierno cubano. Algunos han optado como país de destino la República del Perú. Este país al principio se mostró hospitalario y les daba la bienvenida a quienes llegaban a esas tierras. Sin embargo de un tiempo para acá, la xenofobia se ha desatado especialmente contra los venezolanos y de un modo muy especial en contra de las mujeres. He aquí las posibles razones: Por envidia. Las mujeres peruanas suelen tener facciones típicas de los aborígenes nativos, en tanto que las de Venezuela son catalogadas como las más hermosas del mundo.  De un modo objetivo, algunas inmigrantes venezolanas no saben hacer ningún trabajo y por su misma pereza las ha llevado a ejercer actividades poco éticas como la prostitución. En efecto, en Perú se lanzó un tema lla